Es por todos conocido, y no estamos descubriendo ningún secreto, que el principal motivo por el cual de pequeños pedíamos permiso desesperadamente a la “profe” para ir a sacar punta al lápiz, era para poder hablar/cotillear con algún amigo/amiga… Nadie sentía un especial amor por la actividad en sí, pero con este invento que os presentamos hoy, todo esto puede cambiar.

Aquí tenéis este pack de tres lápices de queso, dónde toda la punta que antes tirábamos a la basura, se convierte en unas virutas de queso que dan el toque justo de chili, pesto o trufa a nuestros platos.

Una gran idea, con un packaging aún mejor, diseñado por la empresa alemana Korefe para la cooperativa de alimentos The Deli Garage, un tándem de lo más KOOL que hemos descubierto aquí!