Cuando alguien viaja a Roma, siempre coincide con alguna impresión como éstas: “qué pizzas tan ricas”, “vaya gafas chulas que llevan los italianos”, “están locos estos romanos”… y sobretodo: “vaya cantidad de piedra!”. Mucha piedra, monumento e historia.

En el 2007, con motivo de un festival de arte contemporáneo celebrado en Bocchignano, una región al norte de Roma, se hizo un proyecto de restauración/landart tan divertido y tan TIK como esto:

Sí, sí… se trataba de reconstruir parte de paredes dañadas con piezas de lego. A TIK nos parece una intervención de lo más Kool: nada ostentosa, pero que no pasa desapercibida, sobre todo para los más peques!