Seguro que más de una vez habéis estado presentes en una de esas controvertidas conversaciones en que se habla a favor o en contra de ese arte urbano que con más o menos acierto decora muros de contención, túneles de metro, paredes de edificios antiguos…
Sin intención de entrar en ese tema, hoy queremos mostraros un producto que podría hacer que más de uno se desahogara antes de querer pintar alguna que otra pared donde no está permitido hacer grafitis.
Se trata de pinturas comestibles en forma de spray con un packaging muy atractivo para los simpatizantes de este tipos de dibujos…
O para chefs atrevidos con ganas de innovar y pasárselo bien en la cocina. Este spray puede servir para pintar postres, verduras, carne… todo lo que se te pase por la cabeza.
Toda la info la encontrarás aquí… Todo tipo de productos comestibles inspirados en objetos y situaciones de nuestro día a día.
