Llega la hora de la cena, y parece que los padres siempre hacen mil y un esfuerzos para convencer a sus hijos para sentarse, estar tranquilo y comida. Técnicas tan sofisticadas como imaginar que sobre la mesa hay un avión que quiere entrar en la cueva, o la técnica de tararear una cancioncita como «una por la mama, una papa, una por ti»; o disfrazar el pescado con un rebozado de 2 cm de grosor y decir que los ha llevado al capitán Pescanova después de luchar contra Moby Dick …

Pues bien, después de muchas historias, finalmente hay quien ha encontrado una solución muy Kool. Una mesa donde poder crear los circuitos de trenes con los que todos los pequeños sueñan. El resultado es este:

No nos digáis que no se prácTIKo … seguro que con ello todos los pequeños estarían deseando ir a la mesa! Si desea saber más, consulte TrackTile Tables.