¿Os habéis parado a pensar cómo de integradas están en nuestros paisajes urbanos la cara de algún jugador de fútbol a tamaño XL? ¿O la modelo superestupenda con las piernas más largas del mundo, mostrándote el nuevo acondicionador que te deja el pelo superbrillante? ¿O los recipientes de yogur perfectos, llenos a rebosar de una crema supercremosa?
Pues bien, una artista francesa llamada Etienne Lavie se propuso borrar digitalmente la publicidad de sus fotografías y sustituirlas por obras de arte mundialmente famosas en calles de Paris y Milán (de momento).
El resultado, titulado «OMG, who stole my ads?», es realmente increíble. Si más no, ayuda a hacernos conscientes de la cantidad de «arte publicitario» que consumimos a lo largo del día…
Una idea genial que dará que pensar a más de uno… Feliz lunes!